Personalidades, bohemios, DJ´s y bailarinas han posado para el famoso fotógrafo en los balcones del hotel en las últimas cuatro décadas.

Pocholo, Carlos Martorell y Willie Márquez han sido algunos de los últimos protagonistas en lucir sus mejores galas ante las cámaras.
Ibiza, 28 de septiembre de 2016 – En 1976 el fotógrafo Toni Riera capturó, por primera vez y junto a la discoteca Pacha, una imagen de la fachada del Hotel Montesol para convertirla en todo un símbolo de la isla. El artista en la primera ocasión apostó por los balcones del hotel en los que se podía ver a diferentes personajes representativos de aquella Ibiza romántica y hippie.
En sus tres balcones se mostraban músicos tocando el violín, unas gogós de lo más atrevidas, una pareja de diseñadoras sudafricanas de la época y Aisha, la hija de una de las musas de Pacha. De esta guisa, la fachada del Hotel Montesol se convirtió en la imagen más personal y auténtica de Pacha hace ya 40 años.
En 1986 volvió al mismo escenario de la mano de un grupo de importantes personalidades como Dj Pippi o Armin Heinemann Paula´s.
En 2005, Roger Sánchez, Jose Pascual, Eric Morillo, Sarah Main y la Mora de las Dalias fueron quienes representaron la primera década del siglo XXI.
Ahora en 2016 y siguiendo la cadencia temporal de las anteriores ediciones de esta foto Toni Riera vuelve a su tan aclamado escenario. “Por fin ha llegado el día de inmortalizar la cuarta versión de esta imagen con los personajes nocturnos del momento. La fachada del Gran Hotel Montesol Ibiza es para mí un escenario más que especial”, confesó Toni Riera.
La última versión de una imagen con 40 años de historia
En esta nueva versión y en conmemoración del 50 aniversario del grupo presidida por Ricardo Urgell, han subido a los balcones del Gran Hotel Montesol Ibiza Curio Collection by Hilton personajes como Pocholo Martínez Bordiú, Francisco Ferrer, Willie Márquez, José Pascual, fundador de los premios DJ Awards, e históricos relaciones públicas de la discoteca como Carlos Martorell y Rosetta Montenegro.
31 modelos de excepción, con extravagantes trajes de plumas y lentejuelas, posaron ante las cámaras de un Toni Riera emocionado por volver a capturar este instante. “Hasta dentro de unos meses, el público no conocerá la cuarta versión de esta histórica imagen”, confesó Toni Riera. Durante media hora el fotógrafo subido a una máquina elevadora a una altura de ocho metros hizo posar a sus modelos en busca de la imagen perfecta.